En estas últimas semanas hemos estado muy ocupados con las nuevas ordenanzas tanto de la ciudad como de nuestra Iglesia. Nuestra vida ha cambiado radicalmente y pese a todo somos y seremos personas de fe, que sabemos que Dios siempre está con nosotros especialmente en los tiempos más difíciles y para recordarnos que todo pasará.
Que sea este un tiempo para estar en familia, vivir nuestra fe, la Semana Santa y la Pascua como nuestras tradiciones y las devociones religiosas que celebramos en nuestros hogares.
Los padres de familia somos los primeros anunciadores de la fe, con la palabra, somos la Iglesia Doméstica.
Este tiempo en familia sigamos practicando nuestra fe, unidos a nuestra comunidad parroquial a través de la Misa, la oraciones y servicios de la Iglesia en línea.
Para lograr esto, tenemos algunas sugerencias, como dedicar un área para nuestra oración (si es que no lo tiene ya). En esa área, dedique un sitio apropiado para hacer un altar.